Fresas para un postre ligerito...

No soy muy de comer fruta... Soy de esas niñas "remilguis" que sólo comen cuatro tipos de fruta y ya está. Pero tengo una debilidad, y de las grandes... ¡Las fresas! Me gustan tanto como la Nutella, el chocolate o el helado.
Por eso, ¡no podía faltar un postre con fresas!

Mi afición por las fresas es un tanto extraña.

 Cuando llega la temporada, empiezo a comer fresas compulsivamente: con zumo de naranja, con yogur, con nata, con cava, con mascarpone o simplemente solas y recién lavadas.

El problema es que cojo la temporada con tanta fuerza que a la semana ya no tengo ganas de fresas y vuelven a apetecerme cuando están a punto de esfumarse hasta el año siguiente.

La historia de este mousse también es curiosa. Desde que vi la receta en Coure Coulants, supe que tenía que hacerla.
La que véis en la foto es la quinta.

Las dos primeras volaron entre catas sin ser fotografiadas. La tercera la hice en Barcelona y tampoco le hice fotografías. Hice una cuarta, que no era para mí, sino para una amiga que me la había encargado. Y me quedé con las ganas de querer comer, y tuve que hacer la que véis en las imágenes para poder quedarme tranquila...

Os dejo la receta...

Mousse de fresas y yogur griego (adaptado de Coure Coulants)

Ingredientes para la base de galletas:
1 tubo de galletas María
60g de mantequilla sin sal
1 cucharadita de canela
1 cucharada de azúcar moreno

Ingredientes para el mousse:
400g de fresas
240g de nata para montar (35.1% de materia grasa)
1 yogur griego (125g)
100g de azúcar
5 hojas de gelatina

Elaboración:
Trituramos las galletas y las mezclamos con la canela y el azúcar moreno.

Fundimos mantequilla en el microondas y la mezclamos con las galletas. Hacemos una pasta y la colocamos en el molde, presionando con una cuchara o los dedos, para conseguir la base. Metemos en la nevera.

Ponemos las hojas de gelatina a hidratar.

Trituramos las fresas con el azúcar hasta conseguir que estén líquidas y sin trocitos.

Montamos la nata con ayuda de unas varillas. Podemos agregarle azúcar o no. Yo siempre le pongo un poquito.

Una vez tengamos la gelatina hidratada, la fundimos en el microondas y se la agregamos al puré de fresas removiendo sin parar.

A continuación, añadimos el yogur y cuando esté bien integrado, agregamos la nata. Para incorporar la nata es importante hacerlo con cuidado, para que no se haga líquida y conserve la textura de mousse.

Guardamos en la nevera para que cuaje. Con unas 4 o 5 horas es suficiente, pero es mejor hacerlo de un día para otro.

Decoramos con fresas troceadas y un poquito de almíbar con gelatina derretida para que no se nos muevan.


Espero que las que votásteis por mousse, estéis satisfechas con la receta. Os aseguro que la receta es sencilla y queda muy muy rica.

Tiene un sabor a fresas muy bueno, suavizado por la nata y con un punto cremoso que le da también el yogur griego.

Nos queda un seguidor para llegar a los 150... ¡Voy entrando como una niña pequeña a ver si veo el número redondito!

La semana que viene creo que toca galletas.

Por cierto, para Blogger Traveller... ¡ya tengo algunas ideas!

Os recuerdo que podéis seguirme a través de Facebook, Twitter, Pinterest o Instagram... Soy una pesada y estoy en todas partes, ¡lo sé! :P

¡Se os quiere!

Con este post, participo en la fiesta de enlaces de Personalización de Blogs