Pensándolo bien, podía haber hecho tiramisú, pero como a mi el café no me acaba de apañar y yo también voy a comer tarta, pues... La hago a mi gusto que seguro que mi padre se la come y no deja ni las migas!
Tenía un bote de nata maravillosa, de esa que sube solo con mirarla y el mascarpone... Asi que lo vi claro!
La nata es ésta y la compré en Iceland, un supermercado inglés que hay en esta zona de Alicante.
Ingredientes para el bizcocho:
3 huevos L
150g de azúcar moreno
150g de mantequilla
180g de harina de trigo tamizada
30g de cacao en polvo
1/4 de cucharadita de Golden Syrup
1 cucharadita y media de levadura química
Un puñado de cookies a pedacitos pequeños
Una pizca de sal
Ingredientes para el almíbar:
Un vaso de leche con nesquik
Ingredientes para la cobertura:
250g de marcaspone
1 bote de double cream (yo la compré en Iceland)
50g de icing sugar tamizado
Elaboración:
Preparamos un molde para hornear. Yo he utilizado un molde redondo de aluminio desechable. Lo he untado con mantequilla y he adherido el papel de horno alrededor.
En un bol, tamizamos la harina, la levadura, el cacao y la sal (sirve para potenciar el sabor del chocolate), y reservamos.
Batimos el azúcar con los huevos hasta que quede una masa doradita. Agregamos la mantequilla y el Golden Syrup y seguimos batiendo
Cuando esté todo bien integrado, agregamos la harina y batimos durante unos 5 minutos a velocidad media para que todos los ingredientes se unan bien entre sí.
Por último echamos las galletas troceadas. Yo he utilizado cookies en versión mini (de Mercadona) y las he hecho pedacitos con un mortero.
Horneamos a 180ºC durante una hora o hora y cuarto. Cuando introduzcamos un palillo y salgo limpio, el bizcocho estará listo.
Mientras los bizcochos se empapan bien, vamos haciendo la crema de mascarpone.
Para que el queso esté más blandito, lo trabajamos un poco con una cuchara. Yo lo he hecho en el mismo bol en el que lo he batido, ayudándome con una cuchara de madera.
Con las varillas eléctricas, batimos el mascarpone con el icing sugar tamizado a velocidad mínima.
Por otro lado, batimos la nata. Es importante que esté muy fría, y el recipiente en la que la vayamos a batir, también. Asi subirá más y quedará mucho mejor.
Después, lo mezclamos todo con movimientos envolventes con ayuda de una espátula, o una varilla.
También se puede batir priero la nata, sin acabar de montar, y luego mezclarla con el mascarpone y el icing y batir con las varillas eléctricas. Pero, así, corremos el riesgo de que la nata se monte demasiado y parezca mantequilla y pierda la textura tan rica que tiene!
La cobertura debe tener una textura similar a la de la nata montada (la casera, no la de bote) y no baja, porque la nata tiene muuuuucha grasa! Pero no pasa nada, el bizcocho es light!
Para decorar, ponemos más galletas mini y queda perfecta!
Os puedo asegurar que tenía razón con lo de que no iban a quedar ni las migas! Es que el mascarpone nunca falla!
q buena pinta, enhorabuena, yo también tengo algun postre parecido en mi blog y me encantan quedan super bonitos, un saludo
ResponderEliminar